La explosión de baterías de monopatines, bicicletas y motocicletas eléctricas, dejaron en 2021 cuatro muertos y 79 heridos en la ciudad de Nueva York, un hecho que ha llevado a las autoridades a distribuir folletos con recomendaciones para su carga, almacenamiento y mantenimiento.
Estos medios rodados de propulsión eléctrica han aumentado de forma exponencial en Nueva York, como en todo el mundo, en los últimos años, planteando además otros problemas como su derecho a circular por las aceras.
“Las bicicletas eléctricas son un recurso valioso para muchos trabajadores neoyorquinos, pero pueden conllevar riesgos de seguridad si no se usan correctamente”, dijo la fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, promotora de la publicación de estos impresos informativos en inglés, español, chino, bengalí y haitiano criollo.
La oficina de la fiscal advierte de que las baterías de estos medios de locomoción empleados por miles de repartidores a domicilio, Al ser de iones de litio y tener una mayor capacidad de almacenamiento de energía, “tienen más probabilidades de incendiarse que una batería tradicional”.
Por esta razón, su oficina recomienda que al comprar baterías se preste especial atención a aquellas que estén de oferta o no tengan marca, por si tuvieran algún defecto.
Las principales recomendaciones, que se pueden consultar en la web del gobierno estatal, son comprar las baterías de un fabricante de confianza, hacer un chequeo de la batería cada cierto tiempo, almacenarla en un lugar seguro, emplear el cableado y el adaptador del fabricante y tirarla cuando no funcione en un punto limpio.
El pasado 17 de septiembre, una niña de 8 años de origen latinoamericano murió como consecuencia de un incendio causado por una batería de iones de litio en el apartamento de su familia en el barrio neoyorquino de College Point, en el distrito de Queens.