En esta receta, el pollo queda jugosito y cremoso, acompañado por la salsa que tiene un rico sabor a queso y una textura incomparable.
Ingredientes:
- 2 pechugas de pollo
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo medianos
- 250 ml de crema
- 200g de queso rallado (de tu preferencia)
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
- Unas ramitas de perejil fresco picado
Preparación:
Corta la pechuga en cubos pequeños (de unos 3 cm por lado) y salpimenta.
Calienta un chorrito de aceite de oliva en un sartén y a fuego fuerte sella los cubitos de pollo para que no pierdan sus jugos.
Apenas dos o tres minutos después, retira el pollo del sartén. Tiene que verse ligeramente dorado por fuera pero debe seguir crudo por dentro.
En el mismo aceite, sofríe a fuego suave la cebolla y el ajo picados. Cuando comiencen a ablandarse, añade la crema y el queso y mezcla a fuego suave hasta que todos los ingredientes se integren, pero con cuidado para la que la crema no hierva.
Añade las pechugas a la salsa y deja cocinar a fuego suave por 5-10 minutos más.
No remuevas demasiado ni dejes que hierva la crema (mantén siempre el fuego muy suave), para que no se corte.
¡Sirve y disfruta!